
Por Arturo Molina
Morelia, Mich., a 14 de mayo del 2024.- Michoacán sigue envuelto en la vorágine de violencia intrafamiliar. A dos años de que concluyó el confinamiento y se reactivó la economía, la violencia persiste al
Interior de las familias.
Informes del Semáforo Delictivo destacan que desde el inicio de la pandemia en 2020, los casos no ha parado de crecer. En el primer año del COVID se registraron 1 mil 185 denuncias.
Para el 2023, último año contabilizado se documentaron 1 mil 479 casos en los 12 meses con un promedio de más de 120 casos mensuales, es decir al menos 4 denuncias por día.
Desde el inicio de la contingencia, autoridades estatales aseguraban que el incremento de este fenómeno era por la situación económica, social y de salud y que se esperaba que una vez se regresara a la normalidad, se pudiera avanzase a disminuir la incidencia. Situación que no se logró.
En lo que va del 2024, suman 336 casos, cifra que de mantenerse de nueva cuenta habrá superado a los registros pre pandemia.