Por Pamela Vázquez vía Glamour
Se acerca el 2025 y el éxtasis se siente en el aire. Bueno, no para todos. Algunos estamos más preocupados por saber cómo manejar el estrés por el Fin de Añoen lugar de organizar una gran fiesta para darle la bienvenida al nuevo ciclo.
Pero no hay vergüenza en ello, pues es más normal de lo que parece. Entre el aumento de precios por la inflación, las deudas que resultaron de los festejos decembrinos, y la presión de comenzar de cero un nuevo año como tu mejor versión, es apenas lógico que nuestro corazón empiece a latir más rápido de lo normal cuando todo esto se nos viene a la mente de pronto.
Aunque no se trata de ignorar las situaciones que requieren ser gestionadas, hay herramientas de salud mental que te permiten digerirlas con mayor serenidad, pues una mente estresada y ansiosa no es el mejor piloto en estos casos. Hemos reunido algunas estrategias que te ayudarán a manejar todo lo que se viene en los próximos 365 días mientras disfrutas del año que terminó y le das la bienvenida al nuevo.
5 consejos fáciles y efectivos de salud mental sobre cómo manejar el estrés por el Fin de Año
Si estás empezando a notar señales de estrés en tu cuerpo, como caída del cabello, resequedad en la piel y uñas, fatiga constante, falta de apetito o malestar general, prueba cuanto antes estas recomendaciones, pues dejar avanzar los síntomas te puede traer complicaciones más graves aún después de que hayan terminado las fiestas.
Aunque estés acostada todo el día, si tu mente está girando al mil por hora pensando en los pendientes que te esperan en el 2025, por más que no hagas actividad física, te sentirás agotada e intranquila. Agrega a tu rutina decembrina una pequeña secuencia de meditación que te permita pausar un momento, concentrarte en el presente y recordarle a tu cuerpo lo bien que se siente la serenidad. Hazla corta para que puedas volver a ella en cualquier momentodel día donde te inunden los pensamientos estresantes.
Muchas veces, los problemas aparecen más vastos y grandes en nuestra cabeza, pues es ahí el único lugar donde nadie puede escuchar nuestras verdaderas quejas, deseos y miedos, así que le damos rienda suelta al cerebro para soltarlo todo. La cosa es que la mente tiene una capacidad de almacenamiento limitada, así que, de vez en cuando es necesario hacer una depuración.
Todo lo relacionado a los gastos de Fin de Año o las reuniones obligadas a las que no quieres asistir seguramente crearán una gran bola de nieve en tu cabeza. Para reducir su tamaño, anota las preocupaciones que están consumiento tu salud mental en orden de importancia. Sentirás un alivio inmediato porque vaciaste tu mente, y podrás verlas con una perspectiva diferente para reevaluar si realmente son tan graves como parecían en tu cabeza.
De esa lista de pendientes, el paso a seguir para completarlos es hacer un cronograma de actividades. Pero supongamos que se trata de un proyecto para el que necesitas estar en tu lugar de trabajo con tus colegas y ya se fueron de vacaciones. Si no hay nada que puedas hacer en diciembre, deja esa preocupación para el otro año, cuando sea el momento de actuar. Mientras, ocupa ese tiempo libre para relajarte, descansar y recargar baterías para los días de trabajo.
En caso de que la meditación no sea lo tuyo, hay otras maneras prácticas para combatir la ansiedad cuando te tome por sorpresa. Puedes encontrar desde accesorios para celular con burbujas de silicón, dispositivos de descargas eléctricas tranquilizantes, o la clásica pelota apretable. Carga uno o varios en tu bolsa del diario para que siempre andes con la tranquilidad de que tienes tu kit antiestrés a la mano.
Cuando lleguen las posadas navideñas, la cena de Nochebuena o la fiesta de Fin de Año, ponle pausa a los incovenientes y enfoca toda tu atención y energía en disfrutar a tus seres queridos, agradecer lo bueno que hay en tu vida, y lo que está por venir. Serán solo unos instantes que te servirán de distracción constructiva para salir de los embrollos mentales causados por las preocupaciones.
Además de seguir estos consejos sobre cómo manejar el estrés por el Fin de Año, procura tener el radar que las festividades decembrinas se hacen para terminar un ciclo y comenzar otro con energía positiva para que no pierdas de vista el propósito de las tradiciones, aunque a veces tienen efectos colaterales no tan agradables.