Por Pamela Vázquez vía Glamour
Los platillos comúnes del 24 y 31 de diciembre son deliciosos, pero también pesados y excesivos, por ello es buena idea saber cómo disfrutar la cena de Nochebuena y Año Nuevo sin descuidar tu salud para no sufrir de FOMO durante la reunión más esperada del año, pero tampoco de arrepentimiento por comer de más y luego de dolores estomacales que arruinen las fiestas.
Más allá de evitar tales o cuales ingredientes (a menos de que seas terriblemente alérgica o intolerante), la clave está en tomar ciertas precauciones y proceder con prudencia en cada tiempo para poder disfrutar todo y terminar la vela sin colitis, gastritis o cualquier otra itis.
Si aplicas las siguientes recomendaciones, ten por seguro que saldrás satisfecha y con bienestar de cualquiera de tus reuniones navideñas, no solo de la cena de Nochebuena y Año Nuevo. Let’s do it!
7 consejos para disfrutar la cena de Nochebuena y Año Nuevo sin descuidar tu salud
Dado que las reuniones navideñas suelen empezar y terminar con comida, tendrás que andar con cuidado todo el tiempo que dure, pero no te precupes, será por tu propio bien y la verdad no son tan difíciles de cumplir.
El primer paso empieza desde antes de que te sientes a la mesa porque no haber comido nada antes de llegar será tu perdición, pues querrás devorar todo lo que te sirvan. Mejor come un snack pequeño antes de presentarte en la reunión y estarás tranquila, pero lista para la hora de cenar.
Si el snack no fue suficiente, podrás ayudarte de las entradas o botanas que suelen ofrecerse al inicio de la cena de Nochebuena y Año Nuevo. Pero cuidado, la meta no es saciarte en el primer tiempo, y para prevenir comer sin parar, toma un plato pequeño o servilleta y sírvete un poco de lo que desees, espera unos minutos, y solo si aún tienes mucha hambre, repite.
Ahora bien, si estás en confianza para pedirle directamente al anfitrión cómo te gustaría que fueran tus porciones, está increíble. En caso de que no y sea más bien buffet, no te sirvas demasiado de todo, empieza por una pequeña prueba de cada platillo para que sepas cuál te gustó y, si lo deseas, puedas repetir.
En muchas cenas se acostumbra a que cada invitado lleve algo de comer por lo que no siempre existe un menú planeado con platillos que combinen entre sí. Si es el caso, sírvete solo cosas que se te antojen juntas, pero si querías algo más, regresa por eso después de limpiar tu paladar con un poco de vino o agua, y dejar que tu estómago procese un poco lo acabas de terminar.
Por la emoción de la reunión que te mantiene entretenida durante toda la velada, puede ser defícil enfocarte al cien por ciento en una sola cosa. Sin embargo, cuando llega la hora de comer, suele haber una breve pausa de esa dinámica para disfrutar de los deliciosos alimentos. Aprovéchala para comer a consciencia y sin prisa,saboreando cada bocado, desde la temperatura hasta la consistencia. Eso te ayudará a evitar dolores estomacales por comer demasiado rápido, como inflamación y gases.
Comer saludable en las fiestas es mucho más que solo cuidar las calorías, así cuando estés por definir si quieres o no tal o cual platillo, piensa en que tal vez sea poco calórico, pero nada nutritivo, y viceversa. Hint: siempre es mejor elegir lo más rico en nutrientes que lo más alto en calorías.
Finalmente, lo que sí debes cuidar con lupa es tu consumo de bebidas, sean family friendly o no, pues tanto el alcohol, como los refrescos e incluso la más inocente de todas, el agua, te puede arruinar tu cena. ¿La razón? Te llenarás de líquidos, provocando hinchazón, dolor y malestar.
Ve mentalizándote sobre estos consejos para disfrutar la cena de Nochebuena y Año Nuevo sin descuidar tu salud antes de que llegue el 24 y el 31 de diciembre, y así podrás pasar a gusto las fiestas priorizando tu bienestar.
